jueves, 24 de abril de 2014

Traslado de blog

Hola a todos,

os informo que debido a los ultimos acontecimiento profesionales tengo que cerrar este espacio para seguir escribiendo en otra pagina.

Para los que quieran seguir leyendome (espero que si porque tengo ganas de contar muchas experiencias de vida de jardin) os invito a visitar mi nuevo blog:

http://parisigardensolutions.weebly.com/blog.html

Un abrazo

martes, 1 de abril de 2014

Preparándose para la primavera


Antes de nada, perdonad la larga ausencia. Entre el duro invierno y la ocurrencia de hechos importantes en mi vida, durante estos últimos meses, no he publicado nada, o casi, en ese blog, .
Tras un invierno marcado por más de diez ciclogenesis explosivas y alertas de vario tipo, el comienzo de marzo en Galicia nos ha regalado una decena de días sorprendentemente calurosos antes los cuales la Naturaleza se ha despertado con brusquedad. Y aunque, durante esta última semana todo haya vuelto a la "normalidad" (lluvia y bastante frío), en el aire se respira la llegada próxima de la primavera. 

El jardinero presuroso debe aprovechar estos días para realizar todos aquellos trabajos de los cuales dependerá el aspecto pulcro del jardín durante la buena estación. Podemos así resumirlos:

  • Limpieza general
  • Incorporación de compost
  • Podas y recortes
  • Siembra de anuales
  • Plantación de rizomas
Hay que reconocer que es bastante trabajo, sobre todo si nuestro jardín muestra un aspecto deslucido tras el largo invierno. Pero se trata de tareas que podemos realizar poco a poco a lo largo de varios días.
Procuro no obsesionarme demasiado con la limpieza. En cambio pongo especial atención en restablecer el equilibrio de formas y volúmenes. De eso depende en buena parte la belleza de un jardín. Finales de invierno es un óptimo momento para estudiar las proporciones e intervenir, si necesario. 

Este año he tenido que devolver la forma y el volumen adecuados a dos Vibrnum tinus desmadrados. Los arbustos de hoja perenne no solo constituyen la estructura del jardín, sino que aportan equilibrio al conjunto contrarrestando las formas laxas de las demás plantas. Por eso es importante que mantengan siempre un aspecto ordenado (ver foto del Viburnum tinus recién podado). 

En esta época podemos también modificar los macizos de nuestro jardín. Quitar, poner, sustituir, todo es posible en esa fase. En el macizo de las stipas, por ejemplo, he quitado las crocosmias y he plantado rizomas de Eremurus. No he resistido a la tentación de probarlos.
Finalmente, he sembrado Lunaria, Alyssum, Guisante de olor y Perejil. 

 

miércoles, 5 de febrero de 2014

Recuperación de un árbol frutal viejo y descuidado


Los arboles frutales se convierten con el pasar de los años en una maraña de ramas que, además de afear la silueta del árbol, es causa de una peor calidad de los frutos, de una mayor susceptibilidad a plagas y enfermedades y de posibles roturas y derrumbamientos. El manzano de la foto por ejemplo aparece recostado sobre un lado. En esos casos es aun posible recuperar esos viejos arboles con una buena poda, lo que no equivale, como podría pensarse erróneamente, a una poda drástica.
En el caso aquí ilustrado el principal trabajo de poda ha consistido en eliminar ramas superfluas o mal posicionadas, o lo que es lo mismo, en seleccionar las ramas mejor situadas. Es un trabajo que el podador hace mentalmente, pero que cualquiera puede hacer marcando previamente las ramas que quiere mantener o las que quiere eliminar.
Tras esta poda este árbol ha vuelto a nueva vida. De hora en adelante será posible practicarle una simple poda de fructificación manteniendo intacta la estructura principal.
Dicho esto, recomiendo practicar podas regulares (todos los años o casi) en los arboles frutales para evitar cortes de gran tamaño.

jueves, 9 de enero de 2014

El letargo del jardinero

Cuando las borrascas profundas empiezan a sucederse casi ininterrumpidamente en la costa atlántica estar en el jardín es prácticamente imposible. 

Durante estos meses dejo que la naturaleza siga su curso y espero pacientemente que remitan las inclemencias del tiempo. Tras días y días de lluvia el agua lo empapa todo, inexorable rebosa de todas partes formando regatos y pequeños saltos. Se la puede escuchar como un murmullo de fondo. Cualquier objeto chorrea literalmente; hasta las piedras manan agua. 

El jardín acaba convirtiéndose en una especie de humedal. El jardinero no desespera, sabe que todo volverá a su esplendor. Y además para la poda no falta mucho.

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Color de Invierno





Pocas veces he encontrado el Salix viminalis en los listados de plantas atractivas en invierno. Sin razón, porque por el color anaranjado de sus ramas, absolutamente inusual en el reino vegetal, se podría considerar una planta extraordinaria.
Es bastante frecuente en el paisaje agrícola porque sus ramas jóvenes, largas y flexibles, han sido tradicionalmente empleadas por los agricultores para hacer cestería, atar las viñas, etc.; bastante menos frecuente, por no decir ausente, en parques y jardines.
Deberíamos, creo yo, tenerla más en cuenta como planta ornamental. De fácil propagación y cuidado podría funcionar perfectamente como planta de jardín dando lugar a composiciones verdaderamente originales.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Protección contra los temporales

Cuando las borrascas atlánticas deciden azotar Galicia con la vehemencia con que lo ha hecho el temporal de este lunes, no queda otra que mirar el jardín desde la ventana. Ante las embestidas del agua y del viento, hombres y animales buscamos refugio y protección y esperamos pacientemente que se apacigüe la violencia del temporal. Las plantas, en cambio, capean las fuertes rachas de viento y las lluvias intensas con asombrosa tenacidad, mientras el jardinero asiste impotente a la lucha extenuante del jardín contra las inclemencias del tiempo.
Desde detrás del cristal, veo las plantas doblarse, sacudidas violentamente por las ráfagas de viento. Temo por ellas porque en esa lucha, arboles y arbustos de nuestro jardín, podrían sucumbir en cualquier momento.
No es momento de acción, sino de reflexión para el jardinero. De él depende, por así decirlo, la estructura defensiva del jardín, la constitución de una barrera vegetal capaz de disminuir los efectos de los temporales.
A la hora de planificar no debemos olvidarnos de estudiar la dirección de los vientos dominantes y emplear los arbustos apropiados para detenerlos o por lo menos atenuarlos, si es que no existen barreras de otro tipo. Hay plantas aptas para esa función. En general los arbustos densos de hoja perenne son de gran ayuda. Una barrera cortaviento no tiene porque ser un seto. Un bosquecillo o incluso una sucesión de arbustos pueden resultar aun más efectivos que un seto recortado. Tenemos que procurar que el viento pierda fuerza al pasar a través de varios arbustos antes de llegar al centro del jardín donde están las plantas más delicadas.
Recuerdo que en el jardín Menecha uno de los arbustos que se plantó con ese fin sucumbió a un vendaval, literalmente arrancado por el viento. Había cometido el error de plantar un madroño demasiado grande, con mucha rama y poca raíz. En estos casos es recomendable utilizar planta pequeña que no oponga al principio demasiada resistencia al viento y que, una vez enraizada, aguantará firmemente las embestidas. Además es recomendable, durante los primeros años, realizar recortes periódicos para fortalecer la estructura y mejorar el equilibrio entre parte epigea y raíz de los arbustos cortaviento.
Un jardín sin protección es un jardín vulnerable que puede darnos no pocos disgustos. Los temporales se viven con más tranquilidad si nuestro jardín puede contar con unos sólidos arbustos cortaviento.

jueves, 17 de octubre de 2013

Hydrangea quercifolia




Existen diversos arboles y arbustos cuya  coloración otoñal es notoria. No hay libro o articulo de revista que no los mencione. En el jardín Menecha ha encontrado su lugar un arbusto de tamaño mediano que pocas veces, a mi parecer, es citado por su espectacular follaje de otoño, siendo mas conocido por sus flores en racimos, también esplendidas.
Las hojas lobuladas de la Hydrangea quercifolia, llamada también hortensia de hojas de roble, adquieren ya en esa época unos tonos otoñales de fuertes contrastes, rojo brillante, purpura, amarillo y verde. Es una de las primeras quizás en anunciar la llegada del otoño.
Su cultivo es extremadamente fácil y apenas requiere poda.